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02-08-2021
Leioa también recuerda a los niños y niñas saharauis
Este año tampoco ha habido Vacaciones en Paz en Euskadi. El Frente Polisario, con la colaboración de asociaciones e instituciones de todo el Estado, ha llevado a cabo un plan alternativo en los mismos campamentos. Las familias vascas lamentan no poder abrazar a los niños y niñas, que atraviesan una situación más dura de la habitual, si cabe. Por ello, desde el tejido asociativo lanzan la campaña “mensajes en las nubes”, para hacerles llegar desde Euskadi todo el apoyo y el calor posibles.
La delegación del Frente Polisario en Euskadi y representantes del grupo de trabajo del programa Oporrak Bakean - Vacaciones en Paz, explicaron en el Parlamento Vasco cómo la situación de pandemia ha impedido que se lleve a cabo el programa por segundo año consecutivo.
Hace más de 35 años que familias, instituciones y asociaciones de Euskadi participan en este proyecto, que pretende mejorar las condiciones de vida de los menores saharauis, ofreciéndoles la posibilidad de pasar el verano alejados de las duras condiciones del desierto y los campos de personas refugiadas. Durante ese periodo, tienen la posibilidad de recibir una alimentación equilibrada, realizar visitas médicas, aprender otro idioma, hacer nuevas amistades, realizar actividades y en definitiva, experimentar otra realidad distinta a la que conocen.
El proyecto alternativo, impulsado por el Frente Polisario, con la colaboración de varias asociaciones e instituciones, tiene como objetivo hacer de puente para retomar el programa habitual en 2022, por ello, además de estar dirigido a niñas y niños ofreciéndoles actividades culturales, deportivas y lúdicas; también se ha desarrollado un apartado dirigido a los padres y madres, con los que se trabajará en torno a los verdaderos valores y objetivos del programa ordinario. Este año, por tanto, no habrá revisiones médicas, ni podrán evitar las temperaturas de hasta 55º, y no se podrá estrechar y difundir las relaciones entre el pueblo vasco y el saharaui.
Para el verano de 2022, si la situación sanitaria lo permite, se necesitarán 300 familias de acogida para acoger a niños y niñas de 8 a 12 años, que vendrán de finales de junio a finales de agosto. Por ello, los y las responsables animan a todas aquellas personas interesadas a acercarse a una de las asociaciones en favor del pueblo saharaui de la zona, a acceder a la web www.oporrakbakean.eus o a escribir a oporrakbakean@gmail.com para recibir toda la información necesaria.
Por otro lado, a nivel de Euskal Herria continúa el proyecto “Oporrak bakean, más que un viaje. Si este verano no podéis venir, ¡iremos!”, la iniciativa que se puso en marcha el pasado verano, mediante la cual se quería llevar maletas y material básico diverso a los niños y niñas que
deberían acompañar a las familias vascas durante el verano. Como las fronteras estaban cerradas no se llevó todo ese material, por lo que se está ultimando el proyecto y planeando su traslado en vehículos donados y de segunda mano en noviembre de este año.
Los campamentos atraviesan una situación difícil. El covid-19 también ha golpeado fuertemente a la población refugiada, y se ha visto más limitada que de costumbre, debido, entre otras cosas, al cierre de fronteras, que ha impedido la llegada de las caravanas solidarias. A todo ello, hay que añadir, que el pasado 13 de noviembre de 2020, se suspendió el alto el fuego, por lo que los soldados saharauis están en guerra, alterando aún más la vida de los campamentos.
Todas las personas implicadas en el programa Vacaciones en Paz, familias de acogida, monitores/as, personal sanitario, ayuntamientos que reciben niñas y niños…, les tienen muy presentes. Por ello, se ha elegido la época estival para poner en marcha la campaña Mensajes en las nubes, inspirada en la leyenda de que el pueblo saharaui es hijo de las nubes y en la idea de que en el cielo no hay fronteras.
Con ella, por un lado, se pretende mantener el contacto entre niñas y niños vascos y saharauis, así como la relación entre familias de acogida y familias biológicas, promoviendo el intercambio de mensajes. Y por otro, se quiere dar a conocer la situación del pueblo saharaui a través del vídeo que se ha elaborado para la campaña.
Durante el verano, se quiere implicar sobre todo a grupos de tiempo libre y familias de acogida. Y a inicios de curso a los centros educativos. Todos los mensajes serán llevados a los campamentos de personas refugiadas saharauis por las personas que viajan allí en noviembre.
Por último, los representantes del programa, han aprovechado para animar a toda la ciudadanía a mostrar su solidaridad con el pueblo saharaui, como siempre han hecho.
La delegación del Frente Polisario en Euskadi y representantes del grupo de trabajo del programa Oporrak Bakean - Vacaciones en Paz, explicaron en el Parlamento Vasco cómo la situación de pandemia ha impedido que se lleve a cabo el programa por segundo año consecutivo.
Hace más de 35 años que familias, instituciones y asociaciones de Euskadi participan en este proyecto, que pretende mejorar las condiciones de vida de los menores saharauis, ofreciéndoles la posibilidad de pasar el verano alejados de las duras condiciones del desierto y los campos de personas refugiadas. Durante ese periodo, tienen la posibilidad de recibir una alimentación equilibrada, realizar visitas médicas, aprender otro idioma, hacer nuevas amistades, realizar actividades y en definitiva, experimentar otra realidad distinta a la que conocen.
El proyecto alternativo, impulsado por el Frente Polisario, con la colaboración de varias asociaciones e instituciones, tiene como objetivo hacer de puente para retomar el programa habitual en 2022, por ello, además de estar dirigido a niñas y niños ofreciéndoles actividades culturales, deportivas y lúdicas; también se ha desarrollado un apartado dirigido a los padres y madres, con los que se trabajará en torno a los verdaderos valores y objetivos del programa ordinario. Este año, por tanto, no habrá revisiones médicas, ni podrán evitar las temperaturas de hasta 55º, y no se podrá estrechar y difundir las relaciones entre el pueblo vasco y el saharaui.
Para el verano de 2022, si la situación sanitaria lo permite, se necesitarán 300 familias de acogida para acoger a niños y niñas de 8 a 12 años, que vendrán de finales de junio a finales de agosto. Por ello, los y las responsables animan a todas aquellas personas interesadas a acercarse a una de las asociaciones en favor del pueblo saharaui de la zona, a acceder a la web www.oporrakbakean.eus o a escribir a oporrakbakean@gmail.com para recibir toda la información necesaria.
Por otro lado, a nivel de Euskal Herria continúa el proyecto “Oporrak bakean, más que un viaje. Si este verano no podéis venir, ¡iremos!”, la iniciativa que se puso en marcha el pasado verano, mediante la cual se quería llevar maletas y material básico diverso a los niños y niñas que
deberían acompañar a las familias vascas durante el verano. Como las fronteras estaban cerradas no se llevó todo ese material, por lo que se está ultimando el proyecto y planeando su traslado en vehículos donados y de segunda mano en noviembre de este año.
Los campamentos atraviesan una situación difícil. El covid-19 también ha golpeado fuertemente a la población refugiada, y se ha visto más limitada que de costumbre, debido, entre otras cosas, al cierre de fronteras, que ha impedido la llegada de las caravanas solidarias. A todo ello, hay que añadir, que el pasado 13 de noviembre de 2020, se suspendió el alto el fuego, por lo que los soldados saharauis están en guerra, alterando aún más la vida de los campamentos.
Todas las personas implicadas en el programa Vacaciones en Paz, familias de acogida, monitores/as, personal sanitario, ayuntamientos que reciben niñas y niños…, les tienen muy presentes. Por ello, se ha elegido la época estival para poner en marcha la campaña Mensajes en las nubes, inspirada en la leyenda de que el pueblo saharaui es hijo de las nubes y en la idea de que en el cielo no hay fronteras.
Con ella, por un lado, se pretende mantener el contacto entre niñas y niños vascos y saharauis, así como la relación entre familias de acogida y familias biológicas, promoviendo el intercambio de mensajes. Y por otro, se quiere dar a conocer la situación del pueblo saharaui a través del vídeo que se ha elaborado para la campaña.
Durante el verano, se quiere implicar sobre todo a grupos de tiempo libre y familias de acogida. Y a inicios de curso a los centros educativos. Todos los mensajes serán llevados a los campamentos de personas refugiadas saharauis por las personas que viajan allí en noviembre.
Por último, los representantes del programa, han aprovechado para animar a toda la ciudadanía a mostrar su solidaridad con el pueblo saharaui, como siempre han hecho.
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